8 herramientas de gestión para el control de calidad

Herramientas Control de calidad

Control de calidad es un proceso importante en un sistema de producción cuyo objetivo es garantizar que los productos entregados cumplan las normas de calidad y rendimiento especificadas por el cliente. Entre otros, los indicadores de control de calidad pueden clasificarse en:

1) Indicadores de proceso (plazo de entrega, productividad de los empleados, etc.) y
2) Indicadores de productos o servicios (se han cumplido los requisitos de finalización del proceso).

Control de calidad busca para minimizar cualquier variabilidad en estos indicadores, ya sea dentro de un proceso o entre procesos cuando intervienen muchos equipos que abarcan varios proyectos. Esto se consigue principalmente centrándose en cuatro elementos clave: comunicación, formación, mejora continua y resolución de problemas.

Las 8 herramientas de gestión para el control de calidad

1. Diagrama de flujo: Los organigramas son una representación estática de un proceso. Aunque son útiles para documentar el proceso, no ofrecen una visión detallada de su eficacia (o ineficacia).

Ejemplo de caso práctico: documentar la calidad en la fase de producto

2. Diagrama de Pareto: una representación gráfica de los datos que puede utilizarse para identificar 80% (o más) de las áreas problemáticas de un proceso. El diagrama de Pareto pone de relieve los numerosos criterios que intervienen en la determinación de las áreas de mejora del proceso.

Ejemplo de caso práctico: documentar la calidad en la fase de proceso

3. Diagrama de Gantt: soporte visual para programar actividades en un marco temporal específico, donde las tareas se codifican por colores en un único gráfico según su progreso y se ejecutan de arriba abajo o de izquierda a derecha en gráficos individuales.

Ejemplo de caso práctico: documentar la calidad en una fase del proceso

4. Gráfico de control: una gran herramienta para supervisar y gestionar los cambios en los procesos a lo largo del tiempo. Este método permite ver si el proceso mejora con el tiempo o no. Los gráficos de control pueden utilizarse para garantizar la estabilidad del proceso, lo que puede conducir a una mejora de la calidad.

Ejemplo de caso práctico: documentar la calidad en una fase individual del proyecto

5. Histograma: una representación gráfica de los datos que puede utilizarse para identificar patrones en los datos.

Ejemplo de caso práctico: mejora de la calidad en la fase de proceso

6. Diagrama de dispersión: una representación gráfica de los datos que puede utilizarse para identificar correlaciones en los datos.

Ejemplo de caso práctico: mejora de la calidad en la fase de proceso

7. Gráfico Pert: una herramienta para comprender la relación entre eventos, actividades o decisiones relacionados. El gráfico PERT es más eficaz cuando existen conexiones claras y concisas entre las actividades relacionadas y se utiliza mejor cuando existe incertidumbre sobre las estimaciones de tiempo.

Ejemplo de uso: mejorar la calidad en la fase de proyecto

8. Método Kano: este método de mejora de procesos combina y colabora todas las técnicas mencionadas anteriormente en una sola tarea, al tiempo que determina dónde se necesitan realmente mejoras.
Ejemplo de uso: mejorar la calidad en la fase de proyecto

A la hora de determinar dónde introducir mejoras en un proceso, es importante entender qué áreas "no deben cambiar".

Las herramientas de control de calidad más importantes son las que interactúan con el cliente y se utilizan para mejorar los procesos.

Por ejemplo, un cliente puede quejarse de que ciertos componentes no se entregaron a tiempo y que no deberían haberse enviado tan tarde. El productor puede entonces recabar información (por ejemplo, entrevistando o visitando a un cliente) sobre esta queja para determinar qué causó el problema y cómo puede evitarse en el futuro.

Conclusión:  Aunque la idea del control de calidad existe desde hace mucho tiempo, el enfoque moderno se ha vuelto más complejo con la llegada de muchas herramientas diferentes que ayudan a los gestores no sólo a hacer un seguimiento del rendimiento de sus proyectos, sino también a identificar áreas de mejora. Comprender y utilizar estas herramientas de control de calidad es esencial para seguir teniendo éxito en el mundo actual.